Tener una idea no tiene nada que ver con la idea en sí. Con esto podemos ver cuán inmensa es la distancia entre los intentos de Hegel y Kierkegaard de definir el ser. Aunque ambos parecen ser existencialistas, la diferencia entre sus raciocinios es la distancia exacta entre el caos y el orden (la iluminación). Existe una brecha entre la causa y el efecto de Hegel. Pocas mentes humanas aún pueden aceptar con certeza la verdad universal que TENER ES SER. Sin embargo, eso es precisamente lo que la iluminación es. Finalmente, ésta es la única forma de que la muerte pueda despertar a la eternidad. |